Funcas le da un respiro al Gobierno: eleva al 5,2% la previsión de crecimiento en 2022 y al 1% la de 2023
La Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) ha elevado sus previsiones de crecimiento tanto para 2022 como para 2023, situando en el 5,2% y en el 1%, respectivamente, sus estimaciones actuales, tras la revisión por parte del INE de las cifras del PIB en la primera parte del ejercicio pasado y la moderación de los precios energéticos. De esta forma, el PIB habrá crecido en 2022 un 5,2%, siete décimas más de lo previsto en octubre, y se espera un crecimiento del 1% este año, frente al 0,7% apuntado en la anterior estimación.
Funcas, que ha publicado hoy las previsiones para la economía española 2022-2024, espera que la economía se acelere el próximo año hasta crecer el 1,8%, lo que permitiría recuperar el nivel de actividad previo a la pandemia. Aunque para este año todos los componentes del PIB se han revisado al alza, Funcas estima que la desaceleración se producirá fundamentalmente porque la mayoría de hogares ya no dispone de un colchón de ahorro para sostener su gasto en consumo.
Así, el encarecimiento de la cesta de la compra, junto al descenso del 1,1% en la renta disponible bruta de los hogares durante los tres primeros trimestres de 2022, ha supuesto una sustancial caída de la tasa de ahorro hasta el 5,7%, nivel inferior a la media del 6,8% registrada en el periodo 2013-2019. «Es decir, ha dejado de crecer el colchón acumulado durante 2020 y 2021, que, sumado a la favorable evolución del empleo, había permitido hasta ahora mantener el consumo pese a la pérdida de poder adquisitivo», ha indicado Funcas.
Caída del PIB
En cuanto al perfil trimestral del PIB este año, afirma que tras la leve caída anticipada en el primer trimestre, para el resto espera avances cercanos al 0,4%. Asimismo, apunta que la desescalada del IPC iniciada en los últimos meses continuará y atenuará la pérdida de la capacidad adquisitiva de las familias y el alza de los costes energéticos de las empresas. «Su efecto expansivo compensará el giro más restrictivo en materia de política monetaria y se hará más patente a partir de la primavera», ha subrayado.
En este sentido, el deflactor del consumo privado crecerá este año un 4,4%, ocho décimas menos que en la anterior previsión, por el abaratamiento de la energía. Por su parte, el deflactor del PIB, la variable que mejor refleja la dinámica subyacente, aumentará un 4,1% (tres décimas menos). Esta previsión de Funcas asume una «contención» de los efectos de segunda ronda, con lo que el descenso de la inflación se afianzará en 2024, con un incremento del deflactor del consumo del 3,5% y del 3,2% en términos de deflactor del PIB.